Los padres fundadores de la Unión General Armenia de Beneficencia, liderados por el filántropo Boghós Nubar Pashá, venían desde hace tiempo con la idea de crear un Hogar Nacional Armenio desde el cual se pudiera brindar el soporte material, financiero y humanitario a todos los armenios residentes en los asentamientos del Imperio Otomano – durante la masacre de 1895 a 1896, 300 mil fueron las víctimas armenias. Muchos de los sobrevivientes de aquel holocausto se refugiaron en Egipto –.
Los fundadores de Parecordzagán tenían una vasta experiencia en la vida pública, lo cual les permitió detectar el momento exacto, dentro de las circunstancias históricas, para hacer realidad uno de sus mayores sueños. Así, el 15 de abril de 1906 a las 18, luego de la misa de Pascuas, estos célebres personajes se reunieron en la residencia de Boghós Nubar para establecer las bases de la UGAB, sin imaginar la perdurabilidad y la importancia que llegaría a tener la Institución a nivel mundial.
Fue concebida sin distinción de creencias políticas, religiosas ni socio-económicas y con varios objetivos: la difusión de la cultura nacional y su historia; la ayuda humanitaria a las víctimas de los desastres naturales y sus consecuencias; el hambre y las enfermedades de las víctimas de guerra; la atención a refugiados, huérfanos y viudas.
Para ese entonces, los armenios del Cáucaso eran víctimas de las luchas contra los azeríes. Esa fue la primera misión de la UGAB. Y así comienza una historia de infinitas obras benéficas de una Institución que, hasta la actualidad, dedica sus esfuerzos para el bienestar de la Madre Patria.
Los fundadores de Parecordzagán tenían una vasta experiencia en la vida pública, lo cual les permitió detectar el momento exacto, dentro de las circunstancias históricas, para hacer realidad uno de sus mayores sueños. Así, el 15 de abril de 1906 a las 18, luego de la misa de Pascuas, estos célebres personajes se reunieron en la residencia de Boghós Nubar para establecer las bases de la UGAB, sin imaginar la perdurabilidad y la importancia que llegaría a tener la Institución a nivel mundial.
Fue concebida sin distinción de creencias políticas, religiosas ni socio-económicas y con varios objetivos: la difusión de la cultura nacional y su historia; la ayuda humanitaria a las víctimas de los desastres naturales y sus consecuencias; el hambre y las enfermedades de las víctimas de guerra; la atención a refugiados, huérfanos y viudas.
Para ese entonces, los armenios del Cáucaso eran víctimas de las luchas contra los azeríes. Esa fue la primera misión de la UGAB. Y así comienza una historia de infinitas obras benéficas de una Institución que, hasta la actualidad, dedica sus esfuerzos para el bienestar de la Madre Patria.
Sedes del Consejo Central
La Unión General Armenia de Beneficencia fue fundada en El Cairo, Egipto, país en el que residió el primer Consejo Central. Para ese entonces, Egipto era una provincia dentro del Imperio Otomano, pero sus influencias británicas hacían que la UGAB pudiera desarrollar sus actividades sin ningún inconveniente. Además, las figuras que integraban la nueva organización eran muy respetadas dentro del ámbito social egipcio.
De todas formas, cuando cayó el sultanato, el nuevo gobierno kemalista comenzó a entorpecer la labor de la Institución. Por tal motivo, el Consejo Central se vio en la obligación de trasladar su sede a París, Francia en 1922. Paralelamente, Boghós Nubar, aún presidente de la UGAB, cambió su residencia también a la capital francesa debido a que el entonces Catolicós de Todos los Armenios, Kevork V. Sureniants le había encomendado la tarea de presidir la Delegación Nacional Armenia en ese país. Esta Delegación tenía como objetivo mantener encuentros personales con los líderes de los gobiernos amigos para proponer la creación de una Armenia autónoma, liberada de Turquía.
La Segunda Guerra Mundial ya se había instalado en Europa, el norte de África y gran parte del Centro Oriente, incluida China. Durante la guerra, Francia había caído en manos alemanas, lo que provocó un cambio en la dirección del gobierno del país. Los nuevos líderes persiguieron a todas las organizaciones no abanderadas con los propósitos gubernamentales alemanes, entre ellas la UGAB.
Nuevamente, el Consejo Central se vio en la obligación de cambiar su sede para preservar la Institución. Por cuestiones legales, financieras y de seguridad, el país más conveniente era Estados Unidos. Por tal motivo, la UGAB se mudó a Nueva York el 18 de octubre de 1942.
De todas formas, cuando cayó el sultanato, el nuevo gobierno kemalista comenzó a entorpecer la labor de la Institución. Por tal motivo, el Consejo Central se vio en la obligación de trasladar su sede a París, Francia en 1922. Paralelamente, Boghós Nubar, aún presidente de la UGAB, cambió su residencia también a la capital francesa debido a que el entonces Catolicós de Todos los Armenios, Kevork V. Sureniants le había encomendado la tarea de presidir la Delegación Nacional Armenia en ese país. Esta Delegación tenía como objetivo mantener encuentros personales con los líderes de los gobiernos amigos para proponer la creación de una Armenia autónoma, liberada de Turquía.
La Segunda Guerra Mundial ya se había instalado en Europa, el norte de África y gran parte del Centro Oriente, incluida China. Durante la guerra, Francia había caído en manos alemanas, lo que provocó un cambio en la dirección del gobierno del país. Los nuevos líderes persiguieron a todas las organizaciones no abanderadas con los propósitos gubernamentales alemanes, entre ellas la UGAB.
Nuevamente, el Consejo Central se vio en la obligación de cambiar su sede para preservar la Institución. Por cuestiones legales, financieras y de seguridad, el país más conveniente era Estados Unidos. Por tal motivo, la UGAB se mudó a Nueva York el 18 de octubre de 1942.
Ayuda de la U.G.A.B. a Armenia y a los armenios
Inmediatamente después de su fundación, el 15 de abril de 1906, la Unión General Armenia de Beneficencia se abocó de lleno a su humanitaria tarea. Es así que acudió urgentemente a paliar la grave situación de los armenios del Cáucaso, víctimas de las luchas armenio-azeríes que dejaron una horrorosa secuela de viudas, huérfanos, hambre y epidemias.
También se envió urgente ayuda material a las regiones de Van, Mush y Jarpert, dotando a las escuelas y orfelinatos de elementos de primera necesidad.
En 1909, año en el que se registró la matanza de más de 30.000 armenios en Adaná y otros pueblos de Cilicia, la Institución llevó su ayuda a millares de huérfanos y viudas.
La U.G.A.B. también fundó orfelinatos, 38 escuelas, talleres artesanales y suministró a los campesinos los elementos para sus tareas agrarias. Centenares de aldeas armenias se vieron beneficiadas por esta ayuda.
Desgraciadamente, la Primera Guerra Mundial frustró los anhelos de reconstrucción de la Madre Patria. Los turcos llevaron a cabo el Primer Genocidio del Siglo XX y nuevamente la U.G.A.B. emprendió la titánica tarea de ayudar a los sobrevivientes de la tragedia, proveyéndoles medicamentos, alimentos y ropa.
También se envió urgente ayuda material a las regiones de Van, Mush y Jarpert, dotando a las escuelas y orfelinatos de elementos de primera necesidad.
En 1909, año en el que se registró la matanza de más de 30.000 armenios en Adaná y otros pueblos de Cilicia, la Institución llevó su ayuda a millares de huérfanos y viudas.
La U.G.A.B. también fundó orfelinatos, 38 escuelas, talleres artesanales y suministró a los campesinos los elementos para sus tareas agrarias. Centenares de aldeas armenias se vieron beneficiadas por esta ayuda.
Desgraciadamente, la Primera Guerra Mundial frustró los anhelos de reconstrucción de la Madre Patria. Los turcos llevaron a cabo el Primer Genocidio del Siglo XX y nuevamente la U.G.A.B. emprendió la titánica tarea de ayudar a los sobrevivientes de la tragedia, proveyéndoles medicamentos, alimentos y ropa.
Ayuda a la recién creada República Armenia
Inmediatamente después del fin de la Primera Guerra Mundial, en 1918, los dirigentes de la U.G.A.B. se trazaron como objetivo fundamental la preservación de los armenios y su identidad nacional en todos los países extranjeros donde se establecieron, como así también la tarea de reconstrucción de la Madre Patria, llevando ayuda fraternal a la recién creada Armenia. La U.G.A.B. abrió escuelas en los países en los que había comunidades armenias, al tiempo que enviaba urgente ayuda al pueblo de Armenia, que padecía miseria y hambre.
El gobierno de Armenia, república que ocupaba sólo una pequeña parte de la Armenia Histórica, era débil y no estaba en condiciones de satisfacer las múltiples necesidades de un pueblo que había vivido los horrores de la guerra. Es por eso que la UGAB amplió su campo de acción. A partir de una iniciativa propia, y con sus recursos materiales, en 1923 construyó el pueblo de Nueva Evdokia, en Armenia. En 1926 un terrible terremoto convirtió en ruinas la segunda ciudad de Armenia, Leninagan (anteriormente Alexandropol, hoy Gumairí). Inmediatamente, La UGAB organizó una colecta para ayudar a los damnificados y envió al gobierno de Armenia todo lo recaudado. Al mismo tiempo, la Institución construyó escuelas en tres aldeas y en el poblado de Nor Jarpert. En Erevan, capital de Armenia, construyó una maternidad y un edificio de viviendas para los intelectuales, y fundó el centro oftalmológico Mary Nubar y un hospital psiquiátrico. La UGAB también contribuyó a equipar la Universidad Estatal de Erevan, y, con recursos de la Fundación Melkonian, publicó más de veinte estudios armenológicos de gran valor.
El gobierno de Armenia, república que ocupaba sólo una pequeña parte de la Armenia Histórica, era débil y no estaba en condiciones de satisfacer las múltiples necesidades de un pueblo que había vivido los horrores de la guerra. Es por eso que la UGAB amplió su campo de acción. A partir de una iniciativa propia, y con sus recursos materiales, en 1923 construyó el pueblo de Nueva Evdokia, en Armenia. En 1926 un terrible terremoto convirtió en ruinas la segunda ciudad de Armenia, Leninagan (anteriormente Alexandropol, hoy Gumairí). Inmediatamente, La UGAB organizó una colecta para ayudar a los damnificados y envió al gobierno de Armenia todo lo recaudado. Al mismo tiempo, la Institución construyó escuelas en tres aldeas y en el poblado de Nor Jarpert. En Erevan, capital de Armenia, construyó una maternidad y un edificio de viviendas para los intelectuales, y fundó el centro oftalmológico Mary Nubar y un hospital psiquiátrico. La UGAB también contribuyó a equipar la Universidad Estatal de Erevan, y, con recursos de la Fundación Melkonian, publicó más de veinte estudios armenológicos de gran valor.
U.G.A.B. y la repatriación
En la década del ’20 una gran cantidad de armenios se habían establecido en los campos de refugiados de Grecia. Sus casas eran precarias, construidas con barro y chapas, y vivían en una situación lamentable. En esas condiciones, expresaron sus deseos de volver a Armenia, aún sabiendo que en esos años la situación del país era difícil y el gobierno no podía repatriarlos. En consecuencia, enviaron una solicitud a las autoridades de la UGAB, pidiendo que les brindaran su ayuda, y la Institución se encargó de establecer a todas esas familias en Armenia. Para la misma época, la UGAB llevó a Armenia a 250 adolescentes huérfanos que vivían en los orfelinatos de la Institución en Jerusalén, quienes, después de recibir instrucción superior en la Madre Patria, se plegaron a la tarea de reconstrucción y desarrollo de la Nación.
Durante 1930 y 1931, con el gran esfuerzo de la UGAB y la ayuda del gobierno de Armenia, más de 10.000 compatriotas fueron repatriados y se establecieron en Armenia. En 1946-47, el gobierno de Armenia solicitó a la UGAB ayuda material para trasladar allí a quienes lo desearan. La Institución organizó una colecta y, con los dos millones y medio de dólares reunidos, lograron repatriar a 105.000 armenios. La U.G.A.B. siempre propició la repatriación, atendiendo a sus deseos de que nuestro pueblo de reuniera en la Madre Patria para participar de su desarrollo.
Durante 1930 y 1931, con el gran esfuerzo de la UGAB y la ayuda del gobierno de Armenia, más de 10.000 compatriotas fueron repatriados y se establecieron en Armenia. En 1946-47, el gobierno de Armenia solicitó a la UGAB ayuda material para trasladar allí a quienes lo desearan. La Institución organizó una colecta y, con los dos millones y medio de dólares reunidos, lograron repatriar a 105.000 armenios. La U.G.A.B. siempre propició la repatriación, atendiendo a sus deseos de que nuestro pueblo de reuniera en la Madre Patria para participar de su desarrollo.
La actualidad
La Unión General Armenia de Beneficencia cumplirá, en el 2006, cien años de historia. Comenzó con un ideal; luego se estableció para llevar a cabo los objetivos propuestos; se ramificó; creció. Lleva en su trayecto el esfuerzo desinteresado de un sinnúmero de benefactores y otros tantos hombres y mujeres, de los cuales no han trascendido sus nombres, pero que igualmente han mantenido el espíritu de una Institución que fue concebida para perdurar.
Hoy, la situación es otra; las metas son las mismas, aunque hay nuevos desafíos. La Madre Patria aún necesita de apoyo. Karapagh también; y la Diáspora que lucha por mantener viva una cultura milenaria de tradiciones como pocas.
La UGAB no se desentiende de esta situación. Por eso, cada dos años realiza una Asamblea General en la que los delegados de todas las filiales se unen para tratar los temas que conciernen a los retos del futuro. Dialogan y evalúan los programas que planifica la Institución, entre los cuales, también figuran las necesidades de los jóvenes armenios del siglo XXI. Y se aseguran de que los proyectos ya establecidos continúen cumpliendo su propósito.
Porque la UGAB cree en el potencial de los estudiantes armenios de transformar el país; porque sabe que los jóvenes son el futuro y necesitan actividades que realcen sus vidas sociales, profesionales y culturales sin olvidar su herencia; porque busca mejorar la calidad de vida de la Madre Patria; y porque apoya las artes, porque sabe que no existe la escasez de talento entre los armenios, nuestra Institución trabaja día a día en el desarrollo de la comunidad.
Orgullo fue lo que experimentaron los 350 delegados de 22 países, que compartieron la 83ª Asamblea General que se llevó a cabo en el 2004 en Ereván. Y ese sentimiento lo transmitió el presidente del Consejo Central, Berge Setrakian en su discurso de bienvenida: "Todos juntos podemos asegurar que, de acá a cien años, otro presidente de la UGAB reportará las actividades de la Institución y tendrá el orgullo, como yo, de saber que hay un pasado repleto de historia y un futuro lleno de increíbles promesas".
Su Santidad Karekin II, Patriarca Supremo y Catolicós de todos los Armenios expresó: "En la actualidad, paralelamente a su misión en la Diáspora, las actividades de la UGAB, así como todas las instituciones nacionales y religiosas, deberían tener como objetivo el desarrollo de la Madre Patria, lo que le dará a la Diáspora la potencia necesaria para ser aún más fuerte".
El presidente de Karapagh, Arkady Ghugassian remarcó: "En mi opinión, si otras organizaciones pan-armenias tuvieran la misma devoción y entusiasmo, muchos de nuestros problemas ya se hubieran resuelto".
El doctor Haroutune Armenian, presidente de la Universidad Americana de Armenia también expresó: "Cerca de sus 100 años de historia, esta organización ha podido transformar maravillosos sueños en realidad… UGAB ha sido la vanguardia creando oportunidades para las futuras generaciones armenias".
"Debemos vivir pensando en nuestra colectiva responsabilidad de promover y preservar nuestra herencia... Mirando al horizonte, hacia nuestro centenario, y de allí en adelante les pregunto a cada uno de ustedes qué pueden hacer hoy para marcar la diferencia en la vida de la Armenia del mañana" dijo Berge Setrakian.
La organización continuará afrontando los retos del mañana y promoviendo programas que mejoren la vida de los armenios alrededor del mundo.
Hoy, la situación es otra; las metas son las mismas, aunque hay nuevos desafíos. La Madre Patria aún necesita de apoyo. Karapagh también; y la Diáspora que lucha por mantener viva una cultura milenaria de tradiciones como pocas.
La UGAB no se desentiende de esta situación. Por eso, cada dos años realiza una Asamblea General en la que los delegados de todas las filiales se unen para tratar los temas que conciernen a los retos del futuro. Dialogan y evalúan los programas que planifica la Institución, entre los cuales, también figuran las necesidades de los jóvenes armenios del siglo XXI. Y se aseguran de que los proyectos ya establecidos continúen cumpliendo su propósito.
Porque la UGAB cree en el potencial de los estudiantes armenios de transformar el país; porque sabe que los jóvenes son el futuro y necesitan actividades que realcen sus vidas sociales, profesionales y culturales sin olvidar su herencia; porque busca mejorar la calidad de vida de la Madre Patria; y porque apoya las artes, porque sabe que no existe la escasez de talento entre los armenios, nuestra Institución trabaja día a día en el desarrollo de la comunidad.
Orgullo fue lo que experimentaron los 350 delegados de 22 países, que compartieron la 83ª Asamblea General que se llevó a cabo en el 2004 en Ereván. Y ese sentimiento lo transmitió el presidente del Consejo Central, Berge Setrakian en su discurso de bienvenida: "Todos juntos podemos asegurar que, de acá a cien años, otro presidente de la UGAB reportará las actividades de la Institución y tendrá el orgullo, como yo, de saber que hay un pasado repleto de historia y un futuro lleno de increíbles promesas".
Su Santidad Karekin II, Patriarca Supremo y Catolicós de todos los Armenios expresó: "En la actualidad, paralelamente a su misión en la Diáspora, las actividades de la UGAB, así como todas las instituciones nacionales y religiosas, deberían tener como objetivo el desarrollo de la Madre Patria, lo que le dará a la Diáspora la potencia necesaria para ser aún más fuerte".
El presidente de Karapagh, Arkady Ghugassian remarcó: "En mi opinión, si otras organizaciones pan-armenias tuvieran la misma devoción y entusiasmo, muchos de nuestros problemas ya se hubieran resuelto".
El doctor Haroutune Armenian, presidente de la Universidad Americana de Armenia también expresó: "Cerca de sus 100 años de historia, esta organización ha podido transformar maravillosos sueños en realidad… UGAB ha sido la vanguardia creando oportunidades para las futuras generaciones armenias".
"Debemos vivir pensando en nuestra colectiva responsabilidad de promover y preservar nuestra herencia... Mirando al horizonte, hacia nuestro centenario, y de allí en adelante les pregunto a cada uno de ustedes qué pueden hacer hoy para marcar la diferencia en la vida de la Armenia del mañana" dijo Berge Setrakian.
La organización continuará afrontando los retos del mañana y promoviendo programas que mejoren la vida de los armenios alrededor del mundo.
Actividades que desarrolla la UGAB en el mundo
En el plano religioso:
- Financiamiento de la construcción de una casa para clérigos y la renovación de la residencia de Su Santidad Karekín II.
- La Santa Iglesia de la trinidad, en el suroeste de Ereván, está siendo construida con fondos provistos por un benefactor de la UGAB.
- Instalaciones del Seminario Vazkenian en el Lago Seván, que cuenta con varios dormitorios, oficinas, bibliotecas y un espacio para cien seminaristas, donación del matrimonio de benefactores Any y Karnig Yacoubian. Él es miembro del Consejo Central de la UGAB.
- Benefactores financiaron la construcción y reconstrucción del Altar Externo de la Santa Sede de Etchmiadzín, la Casa Clerical en la Santa Sede, las iglesias San Sarkis y Santa trinidad en Ereván, la iglesia San Hagop en Gyumrí, San Gregorio de Narek en Vanadzor y la Catedral San Gregorio el Iluminador en Ereván, la iglesia armenia más grande del mundo.
En el plano social:
- La UGAB y la Santa Sede de Etchmiadzín, en conjunto, mantienen en funcionamiento seis comedores ubicados en Etchmiadzín, Hrazdán, Seván y Ereván que alimentan a 1200 huérfanos y pensionados por día; y tres Centros de Niños que educan a 3500 chicos y adolescentes en artes, lengua, informática y gimnasia.
- Proyecto de Repoblación de Karapagh perteneciente a Francia, que ayuda a reconstruir las villas destruidas por la guerra con Azerbaidjan y que permanecen abandonadas desde 1988 a 1994. El Consejo Directivo de la UGAB de Francia inició también un programa de asistencia para las viudas de la guerra y sus hijos. Provee a cada familia dos vacas lecheras y dos terneros para suplementar sus medios de vida. Las sedes de la UGAB de Los Ángeles y Londres recaudaron fondos para apoyar este programa. En Norashén viven 22 familias y es uno de los primeros pueblos que serán reconstruidos en Karapagh.
- En Karapagh se tiene como proyecto la construcción de una de las calles más largas en Stepanakert y un edificio para las familias de los veteranos de guerra.
En el plano educativo:
- 30 escuelas en América del Norte y Sur, Europa, Medio Oriente y Australia, con más de 6500 estudiantes.
- Durante 2002-2003, la asistencia financiera de la UGAB culminó casi en un millón de dólares, permitiendo a 1119 be-cados en 30 países satisfacer sus metas educativas.
- La construcción de una escuela para 600 alumnos en Karapagh.
- El Programa Pasantías de Verano de la UGAB de Nueva York y París permite a estudiantes de todas partes del mundo realizar pasantías bancarias, financieras, gubernamentales, como así también en medicina, leyes, periodismo, medios, educación, relaciones públicas y relaciones internacionales. En estos dos últimos años, 67 estudiantes de 11 países participaron de esta actividad que se lleva a cabo anualmente con una duración de dos meses.
- La UGAB sirvió de instrumento para fundar la Universidad Americana de Armenia y para apoyar los proyectos de la Universidad Estatal de Ereván. Sus egresados –con títulos en manejo de negocios, ingeniería, leyes, medicina pública, ciencias políticas y ciencias infor-máticas – trabajan para desarrollar la industria local y la tecnología en beneficio de Armenia.
- Los Jóvenes Profesionales armaron un programa como "Próxima Generación" en Los Ángeles, con el cual los adolescentes pueden ser asignados por mentores quienes los ayudarán con los obstáculos académicos y sociales.
En el plano medicinal:
- El Centro de Ultrasonido fue fundado en conjunto con el Instituto Educativo y de Investigación de Ultrasonido Jefferson de Filadelfia. Ubicado en la Universidad de Medicina de Ereván, se concretó con el trabajo y la dedicación del doctor Levón Nazarian, hijo del benefactor y miembro del Consejo Central, Nazar Nazarian. Médicos de Rusia, Ucrania, la India y China han estudiado en este centro por sus cualidades educativas. Ofrece las herramientas más avanzadas para el diagnóstico clínico mediante cursos de entrenamiento ofrecidos conjuntamente con la Universidad Estatal de Medicina de Ereván.
En el plano artístico:
- La Orquesta Filarmónica de Armenia es financiada por la UGAB desde 1992 y recibe becas anuales para su administración.
- La Orquesta de Cámara de Karapagh, fundada recientemente con los fondos de la UGAB, cuenta con más de 25 integrantes.
- Algunas sedes apoyan grupos de danza, coros, grupos teatrales y otras expresiones.
En el plano deportivo:
- La UGAB realiza sus Olimpíadas Mundiales cada dos años.
- El Campamento de Verano se lleva a cabo en Nueva York, Francia, y Siria. Se anotan 600 alumnos anualmente. De dos a seis semanas, cumplen un programa lleno de actividades deportivas, educativas y culturales.
- AYA (Asociación de Jóvenes Armenios, Liga de Jóvenes) Deportes y Scout tiene miles de miembros en los cinco continentes.
En el plano periodístico:
- Diez publicaciones en cinco idiomas. AGBU News de Nueva York, UGAB Magazine de París, Hoosharar que es la más antigua y se edita en idioma armenio, Generación 3 de Buenos Aires, Josnag del Líbano, Deghuegadú del Cairo, Mioutune de Sydney, Deslik de Toronto y Ararat de Nueva York, sirven a la comunidad internacional. Sumado a sus propias publicaciones, la UGAB ayuda a otros medios armenios, como así también a la Unión de Escritores de Armenia. En 2002, la UGAB financió la traducción y la publicación del crítico y aclamado best-seller de Peter Balakian, "Black Dog of Fate".
- Cooperando con la Televisión de Nueva York, la UGAB trabajó en la producción de Armenian Americans, un documental de una hora de duración que se transmitió en ciudades de Estados Unidos y Canadá. En 2001, el segundo documental se llamó "Los Armenios: una historia de supervivencia".