Un tribunal de Trebisonda declaró hoy probado que el entonces comandante de la Gendarmería, el coronel Ali Öz, y el capitán Metin Yildiz, cometieron un acto de negligencia al no informar a sus superiores sobre los planes de asesinar a Dink, debido a que uno de los implicados era confidente de este cuerpo adscrito al Ejército.
Otros cuatro gendarmes recibieron penas de 4 meses de prisión, mientras que otros 2, también acusados fueron declarados inocentes.
Uno de los abogados de la familia Dink se mostró satisfecho por la decisión del tribunal, pese a que se ha sancionado a los imputados con la pena más leve que exigía la acusación, que pedía condenas de entre 6 meses y 2 años para los principales acusados.
Dink se había caracterizado por sus críticas tanto al nacionalismo turco como a la diáspora armenia y era un firme defensor de la tolerancia entre las diversas etnias de Turquía.
