El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, alertó a Francia sobre las consecuencias "graves" e "irreparables" que tendría la adopción de una ley que reprime la negación del genocidio armenio, y pidió al presidente francés frenar esa propuesta, informó la agencia Anatolia.
"Quiero dejar bien claro que si esos esfuerzos llegan a su objetivo, las consecuencias para las relaciones políticas, económicas, culturales y cualquier otro dominio con Francia serán graves", explicó Erdogan en una carta enviada al presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Erdogan, cuyo país se niega a reconocer el genocidio armenio, mencionó también el impacto "irreparable" que tendría para las relaciones bilaterales la votación de ese proyecto de ley en el Parlamento francés.
"Deseo sinceramente que usted mantenga su promesa de frenar esta iniciativa y evite de esa forma pasos que tendrán consecuencias irreparables", apuntó Erdogan en su carta.
El primer ministro turco también pidió a Francia que use el "sentido común" y evite que las relaciones bilaterales se tornen "rehenes de los reclamos de terceros", en una referencia a Armenia.
"Este proyecto de ley afecta directamente a la república de Turquía, la nación turca y la comunidad turca de Francia, y por lo tanto la consideramos hostil", añadió Erdogan
"Quiero dejar bien claro que si esos esfuerzos llegan a su objetivo, las consecuencias para las relaciones políticas, económicas, culturales y cualquier otro dominio con Francia serán graves", explicó Erdogan en una carta enviada al presidente francés, Nicolas Sarkozy.
Erdogan, cuyo país se niega a reconocer el genocidio armenio, mencionó también el impacto "irreparable" que tendría para las relaciones bilaterales la votación de ese proyecto de ley en el Parlamento francés.
"Deseo sinceramente que usted mantenga su promesa de frenar esta iniciativa y evite de esa forma pasos que tendrán consecuencias irreparables", apuntó Erdogan en su carta.
El primer ministro turco también pidió a Francia que use el "sentido común" y evite que las relaciones bilaterales se tornen "rehenes de los reclamos de terceros", en una referencia a Armenia.
"Este proyecto de ley afecta directamente a la república de Turquía, la nación turca y la comunidad turca de Francia, y por lo tanto la consideramos hostil", añadió Erdogan
