jueves, 22 de enero de 2015
Mujica "el Genocidio Armenio es una de las causas pendientes que tiene nuestra humanidad”
El presidente José Mujica hizo ayer nuevamente un llamado a aceptar “lo diverso” y rechazó las demostraciones de violencia “fruto del fanatismo”. El mandatario, junto a la ministra de Turismo Liliam Kechichian, recibieron ayer en la torre Ejecutiva a una delegación de la comunidad armenia conformada por representantes de partidos políticos, de organizaciones de la sociedad civil y de confesiones religiosas, junto al cónsul honorario en Uruguay, que se está preparando para recordar en el próximo mes de abril los 100 años del “genocidio armenio”, acción militar desarrollada por el entonces gobierno turco contra la población armenia.
“El respeto a las culturas de los inmigrantes, la aceptación de lo diverso y el rechazo de los fanatismos son virtudes que Uruguay debe seguir cultivando”, dijo Mujica ante representantes de la comunidad armenia, agregando que Uruguay “es el país más laico de América Latina y a la vez el que más reconoce tradiciones, religiones y nacionalidades”.
Mujica hizo un repaso sobre la condición de los inmigrantes que en su momento comenzaron a llegar y a poblar el país haciéndose énfasis en la colectividad armenia que se fue instalando fundamentalmente en Montevideo y en zonas rurales cercanas a la capital. Actualmente se calcula que en Uruguay hay unos 14.000 miembros de la comunidad armenia. Tal como lo hizo cuando recibió en Uruguay al presidente armenio, Mujica destacó que nuestro país fue el primero en el mundo en reconocer y marcar por resolución parlamentaria en 1965 la condena al también llamado “holocausto armenio”, acto que solo 20 años después fue tomado por otros estados. También por resolución legislativa se conmemora esta tragedia mediante un acto oficial desde el año 2000, ilustró.
Cada 24 de abril se conmemora el arresto masivo de unos 300 armenios en Estambul hecho ocurrido en el año 1915. Este acontecimiento marcó el inicio de la matanza de alrededor de un millón y medio de personas, según algunos cálculos históricos, y la deportación de todo el resto de la población de ese origen y de otras etnias de lo que era entonces el Imperio Otomano, sin derecho a recoger bienes y ni siquiera elementos de supervivencia.
“No podemos alterar el pasado, pero tenemos que aprender de él y reconocer las barbaridades que los hombres hemos hechos, para que las próximas generaciones no caigan más en esas barbaridades a las que el hombre está expuesto por ser el único animal capaz de tropezar varias veces con la misma piedra”, remarcó Mujica.
Sobre el caso armenio, Uruguay tuvo la decisión de “reconocer el genocidio, algo que aún hoy muchas veces es negado por supuestas razones de Estado”, señaló, destacando que “es una de las causas pendientes que tiene nuestra pobre humanidad”.