Turquía critíca la resolución que el Parlamento alemán pretende aprobar mañana sobre el Genocidio armenio en el antiguo Imperio otomano de 1915 a 1923.
“Esta votación es ridícula. Nuestra relación con Alemania se verá afectada, no hay duda de eso” afirmó el primer ministro turco, Binali Yildirim.
La decisión del Gobierno germano es apoyada por el líder del partido alemán de Los Verdes, Cem Özdemir, quien es hijo de inmigrantes turcos y musulmán:
“Los que realmente tienen que preocuparse no son los miembros del Parlamento, después de todo nosotros no estamos en peligro. Al contrario, es la gente que vive en Turquía. Ellos deben pagar a veces con su vida al hablar de estos temas.”
El primer ministro turco ha asegurado que en caso de que la moción sea aprobada por el Bundestag, esto no impide continuar con el acuerdo alcanzado con la Unión Europea para la gestión de la crisis de los refugiados.
Un monumento en Armenia rinde homenaje al millón y medio de personas de las minorias cristianas de este país que perdieron la vida en la masacre. Ankara ha lamentado las matanzas y deportaciones forzosas de los civiles armenios, pero, se ha negado a reconocerlas como genocidio.
