miércoles, 22 de abril de 2015
ARMENIA advierte a la humanidad de lo riesgoso de negar GENOCIDIOS.
“El genocidio es un fracaso de la comunidad internacional y su impunidad es la premisa para su repetición ” , dijo Sargsián en su discurso de apertura de un foro internacional sobre el genocidio en la capital armenia. Sargsián, que presidirá el viernes la conmemoración junto a otros líderes como los presidentes ruso, Vladímir Putin, y francés, Francois Hollande, aludió en todo momento a Turquía, el país heredero del Imperio otomano, aunque sin mencionarlo.
“ La negación del genocidio contiene elementos de una nueva ola de odio nacional y está acompañado en muchas ocasiones de intolerancia y justificación de los genocidios cometidos ” , destacó. Al aludir al genocidio armenio, pero también al de Ruanda, Camboya y Darfur, aseguró que estos crímenes deben ser recordados no sólo por los descendientes de las víctimas, sino por los de aquellos que protagonizaron esos genocidios.
Subrayó que los armenios tienen la obligación moral, pero también el derecho a recordar la muerte de 1,5 millones de personas, el sufrimiento de otros cientos de miles en las deportaciones y el exterminio del legado material y espiritual acumulado durante milenios. Con todo, agregó, “ los organizadores del genocidio no lograron llevar a la práctica sus intenciones. Los armenios se presentan ante la comunidad internacional como un país independiente, con un (enclave armenio) Nagorno Karabaj libre y una próspera diáspora ” .
Y tuvo un recordatorio especial para los turcos, kurdos y árabes, además de los misioneros, diplomáticos y comerciantes rusos, europeos y estadounidenses que socorrieron a los armenios perseguidos y salvaron numerosas vidas. El aniversario ha estado precedido por la polémica, ya que el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, insiste en negar rotundamente que las autoridades otomanas hubieran cometido un genocidio contra su minoría armenia.
Hasta ahora han reconocido el genocidio armenio 22 países: europeos, como Francia, Alemania, Italia, Canadá, Grecia y Rusia -a los que se les podría sumar hoy Austria-, y latinoamericanos como Uruguay, Argentina, Venezuela, Chile y Bolivia. Otros países, entre ellos Estados Unidos, no quieren emplear el término genocidio, aunque en las últimas semanas se ha incrementado la presión sobre el presidente Barack Obama, para quien Turquía es un país crucial en su política hacia Oriente Medio.
Como resultado del genocidio surgió la diáspora armenia, muy influyente en países como EEUU, Francia o Argentina, mientras la actual Armenia logró su independencia tras la caída de la Unión Soviética en 1991