jueves, 16 de febrero de 2017
Religiosos turcos en Alemania,espiarian a opositores de Erdogan
La oficina Federal de Investigación Criminal (BKA) alemana registró hoy las viviendas de cuatro imanes turcos que están bajo sospecha de haber recabado informaciones sobre opositores al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y haberlas transmitido al consulado de ese país en Colonia.
Así lo informó hoy la Fiscalía Federal Alemana en un comunicado, en el que indica que los registros se produjeron en los estados federados de Renania del Norte-Westfalia y Renania Palatinado, ambos en el oeste del país.
Los actos de espionaje de los imanes se dirigían presuntamente contra personas cercanas al movimiento del predicador Fethullah Gülen, al que Erdogan considera responsable del intento de golpe de Estado en su contra el 15 de julio de 2016.
Según la Fiscalía, el origen de estos actos esté en una petición realizada por el Diyanet, el Ministerio de Religión turco, el 20 de septiembre de 2016 según la cual el movimiento Gülen estaba detrás del fallido golpe de Estado.
En una breve declaración ante los medios, la portavoz de la Fiscalía, Frauke Köhler, explicó que no hubo detenciones, ya que el juzgado competente rechazó emitir órdenes de arresto.
Los agentes se incautaron en los registros de distintos materiales, memorias de datos y documentos que serán ahora analizados para estudiar si refuerzan las sospechas de la Fiscalía.
Los imanes bajo sospecha están vinculados a la Unión Turco-Islámica de Asuntos Religiosos (Ditib, por sus siglas en turco), una de las organizaciones que representa a la religión musulmana en Alemania y que, por ejemplo, facilita profesores de religión a los colegios en algunos estados federados.
"Si se confirman las sospechas de que algún imán de Ditib ha realizado labores de espionaje, la organización no puede negar que es, al menos en parte, un brazo del Gobierno turco", manifestó el titular alemán de Justicia, el socialdemócrata Heiko Maas, tras conocerse la redada.
El ministro advirtió de que no hay nada que justifique la comisión de un delito y subrayó que "quien usa el islam como tapadera para el espionaje no puede apelar a la libertad religiosa".
A su juicio, la influencia del Gobierno turco en Ditib es "demasiado grande" y la asociación debe romper su alianza con Ankara, lo que exige cambiar sus estatutos, ya que establecen un estrecho vínculo con Diyanet, el Ministerio de Religión turco.
Para Justicia, Ditib sólo tendrá futuro como "socio de confianza" de Berlín si se convierte en una asociación alemana independiente.
La sospecha de que imanes turcos estaban desarrollando labores de espionaje en Alemania había circulado en los medios desde hace varios meses y la propia canciller, Angela Merkel, destacó en su reciente visita a Turquía que esas actividades "no debería ocurrir".
Gülen inicialmente fue un aliado de Erdogan, pero luego hubo un distanciamiento entre los dos y actualmente el líder religioso está en el exilio en Estados Unidos.
El movimiento Gülen tiene colegios privados en 140 países, incluida Alemania. Sus defensores lo consideran como la expresión de un islam pacifista, mientras que sus detractores le atribuyen las características de una secta.