jueves, 20 de octubre de 2011

NAVASARTIAN 2011,informe gentileza de Arsen Sahakian.

Tras 15 años de historia de los Juegos Navasartian, 15 años de vivencias imborrables
donde se tejieron sentimientos y amistades, resultaba un gran desafío la organización de
la decimosexta edición de los mismos.
Y más aún, teniendo en cuenta que tan solo unos meses atrás había asumido la nueva
Comisión de Homenetmen filial Montevideo, integrada en su totalidad por jóvenes del
Club Vramian, en su mayoría debutantes en la dirigencia.
Casi de inmediato, comenzaron a planificar la nueva edición de los juegos, siendo el
principal objetivo idear una propuesta atractiva para los jóvenes proponiendo algo
novedoso. Pensando que un cambio de lugar como sede podía darle un toque de
distinción, surgió la idea de realizarlos en Punta del Este, una de las ciudades más
atractivas de Sudamérica.
La organización a distancia, la búsqueda del lugar y solucionar todos los problemas de
infraestructura y logística no fue tarea fácil e insumió meses de preparación y trabajo que
la comisión desarrolló con gran entusiasmo y eficiencia.
Vale destacar que junto a la comisión directiva, trabajaron varias comisiones de apoyo
que asumieron tareas en distintas áreas y en las cuales se integraron jóvenes y adultos de
todas las instituciones del club.
El gran despliegue de trabajo y organización, rápidamente despejó las dudas de los que
pensaban que no era posible ni deseable hacer un Navasart fuera de nuestra sede, porque
todos los detalles fueron tenidos en cuenta, inclusive facilitar la asistencia del público por
medio de locomoción gratuita que cada día realizaba el trayecto Montevideo-Punta del
Este ida y vuelta.
El proyecto avanzaba y el entusiasmo crecía en toda la región.
Finalmente llegó el día y las espléndidas instalaciones del Campus de Maldonado se
vistieron de Armenia con banderas gigantes, escudos de Homenetmen por doquier y
banners que recibían a las bulliciosas delegaciones con más de 450 jóvenes provenientes
de Buenos Aires, Córdoba, Montevideo, Rosario y San Pablo. El plus lo puso Venezuela
participando con una delegación pequeña pero muy entusiasta que disfrutó a pleno de
todo lo vivido.
La ceremonia de apertura fue uno de los hitos de Navasart, mostrando la alegría, cánticos
y música de los deportistas que iban ingresando al son de la marcha Ariunod Trosh.
De allí en adelante y durante los tres días de los juegos, se sucedieron las competencias
deportivas en los varios gimnasios y campos de juego del Campus, mientras los asistentes
se repartían entre las tribunas, los jardines o la carpa gigante que servía de confortable
living y salón comedor, donde además se podía disfrutar de videos con artistas y música
Armenia a toda hora.
Para los más chicos hubo un mini parque de diversiones a demás de un baile matinée,
donde no faltaron golosinas, barra de jugos, cotillón ni disfraces para que pasaran una
tarde inolvidable en los salones del Nogaró.
Los jóvenes como es tradicional tuvieron su emblemático baile de Navasart en el Casino
Nogaró, que es siempre uno de los momentos más disfrutables de los juegos.
Allí, una vez mas demostraron su identidad armenia y su compromiso, cerrando el baile
con un repertorio completo de canciones patrióticas entonadas a coro y con el puño en
alto, mostrando que generación tras generación la llama se renueva y aumenta su
intensidad.
La alegría y el entusiasmo de grandes y chicos dio la pauta de que todos disfrutaron cada
instante de los tres días compartidos. Muchos dijeron que hay un antes y un después de
este Navasart.
No lo sabemos, pero sí estamos seguros que este grupo de trabajo dio lo mejor de sí
mismo para que todo saliera como se había planificado, y se puso esta tarea al hombro
con la alegría y responsabilidad que trasmite el espíritu homenetmenagan.
Estamos seguros que esta decimosexta edición de los Juegos Navasartian quedará por
siempre en el recuerdo de todos aquellos que tuvieron la posibilidad de participar
GRACIAS POR HABER SIDO PARTE Y POR AYUDARNOS A HACER UN
NAVASART DIFERENTE...