miércoles, 3 de agosto de 2011

5000 personas piden a Presidente Lugo, que Paraguay reconozca el Genocidio Armenio.

Montevideo, 3 de agosto del 2011

Excelentisimo Señor Presidente de la República del Paraguay,
Don Fernando Lugo.


De nuestra mayor y más respetuosa consideración.

Quienes suscriben respresentamos a un colectivo de más de 5 mil personas, de diversos credos y convicciones personales, de diversas nacionalidades, de diversas profesiones y roles en la sociedad, vinculados o no a la comunidad armenia, pero que coincidimos en un punto: que el reconocimiento del GENOCIDIO ARMENIO PERPETRADO POR EL ESTADO DE TURQUIA es una causa de la Humanidad entera y que mientras no brille la luz de la verdad, se sigue abriendo una herida en la piel de los descendientes de las víctimas, en la sensibilidad de todo hombre de buena conciencia y en la moral de la Humanidad entera.

No escapa a su conocimiento que la comunidad Armenia fue víctima, a partir de 1915, de una políitica de exterminio sistemático por parte del estado turco, que al cabo de una década cobró un millón y medio de víctimas absolutamente inocentes, en un clarísimo ejemplo de GENOCIDIO.

Tampoco escapará a su excelencia, el notorio hecho que el Estado de Turquía niega internacionalmente este genocidio, presiona activamente gobiernos y parlamentos para evitar el reconocimiento del GENOCIDIO ARMENIO y, al interior, desde su código penal y desde sus prácticas políticas y sociales, reprime severamente la mera mención al genocidio, de lo cual es paradigmático ejemplo el asesinato del periodista Hrant Dink en enero del 2007, incansable luchador por el entendimiento a partir de la verdad histórica.

El colectivo que por nuestro intermedio requiere su atención por este intermedio, se formo en Uruguay, a través de las redes sociales que Internet facilita. Con total espontaneidad, sin ningun otro motor o estimulo que la conciencia lacerada por el salvaje genocidio y por la mentira y el ocultamiento permanente y pertinaz. Uruguay fue el primer Estado en reconocer el GENOCIDIO ARMENIO y quizas por este hecho, el grado de conciencia que exite en la poblacion uruguaya respecto a la tematica sea particularmente importante. Pero nuestro colectivo tiene hermanos argetinos , hermanos paraguayos, hermanos brasileños y hermanos, simplemente hermanos, de donde quiera que hayan visto la primera luz del dia, pero que respiran, siente, piensan y sufren igual que todos nosotros.

Nuestro propósito es coadyuvar a la toma de conciencia sobre la imperiosa necesidad del RECONOCIMIENTO DEL GENOCIDIO ARMENIO en todos aquellos Estados donde aún no ha tenido lugar.

Excelentísimo Señor Presidente, la República del Paraguay no se encuentra en la lista de Estados que han reconocido a título expreso el GENOCIDIO ARMENIO. Y la República del Paraguay, a su turno y en su contexto, ha sido todo un ejemplo de dignididad, resistencia ante el atropello, ante la adversidad y de capcidad de salir adelante apostando a las causas más justas y humanas.



Excelentísimo Señor Presidente Don Fernando Lugo, no escapa a nuestro conocimiento que su trayectoria vital muestra una muy marcada sensibilidad, identificación y compromiso con el mas desvalido, con los desheredados de la tierra, con los pobres y los humildes de la Tierra.


Es por este motivo que le solicitamos, con el mayor respeto y fraternidad, que la República del Paraguay se sume a la lista de Estados que han reconocido el GENOCIDIO ARMENIO.

Se lo pedimos nosotros por el millón y medio que no se lo pueden pedir. Los enviados a morir a zonas despobladas, sin provisiones ni atención, de hambre, sed o enfermedades. Los padres ejecutados delantes de sus hijos y los hijos ejecutados delante de sus padres. Los abuelos y nietos que jamás pudieron conocerse.

Se lo pedimos nosotros porque seguimos pensando que en la naturaleza humana, imperfecta y llena de luces y sombras alienta una vocación de trascendencia hacia la justicia, la verdad, la solidaridad.


Excelentísimo Señor Presidente, reciba Ud. y todo el pueblo de la República del Paraguay que Ud. representa, el mas respetuoso y fraternal saludo.

Y que el camino de la luz, la verdad y la vida, prevalezcan siempre sobre las tinieblas.