domingo, 25 de septiembre de 2016

Gülen:"Erdogan planeó el golpe en su contra""


El presidente turco Recep Tayyip Erdogan llama al clérigo musulmán Fetulá Gülen terrorista y lo acusa de haber orquestado el golpe de estado del 15 de julio. Gülen compara a Erdogan con los nazis y le devuelve la acusación. El golpista no es él —un hombre de 75 años que vive alejado del mundanal ruido en Saylorsburg, un pueblo de mil habitantes en las montañas de los Poconos— sino el presidente turco.

“Antes lo veía como una posibilidad”, dice Gülen en una entrevista. Se refiere a la implicación de Erdogan en el golpe. “Pero en días recientes, con todas las pruebas que han salido, que él lo planeó se ha convertido en una certeza. Se está aprovechando del golpe para reforzarse”.

Gülen es más que un clérigo. Es un líder espiritual, inspirador de una organización, Hizmet (Servicio), vinculada a centenares de escuelas por todo el mundo y acusada —ahora por Erdogan, pero en el pasado por otros críticos del movimiento— de infiltrarse la educación, la administración, las fuerzas armadas turcas y los medios de comunicación. Miles de gülenistas fueron encarcelados tras el golpe en Turquía, o perdieron el empleo. Turquía ha pedido a Estados Unidos, donde Gülen vive desde hace 17 años, su extradición.

"Lo que está ocurriendo con los simpatizantes de Hizmet [en Turquía] no es una sorpresa. Si mira a la historia de las personas dedicadas al bien de la humanidad, siempre han sido perseguidas. Si mira a la historia de los profetas, Noé, Abraham, Jesús, todos sufrieron", dice Gülen. “Si me acusan de algo, deberían ser ellos [Erdogan y sus aliados en Turquía] quienes lo demostrasen”.


Gülen asegura haber desconfiado de Erdogan desde el principio. Cita una reunión que mantuvo con él en 1998 o 1999. “Por respeto a su petición compartí algunas ideas con él. Más tarde me enteré de que cuando iba hacia el ascensor le dijo a quien le acompañaba que deberían acabar con el movimiento a la primera oportunidad", recuerda. "Eran intolerantes desde el principio”.

A la pregunta sobre si está en condiciones de garantizar que sus simpatizantes no estuvieron implicados en el golpe, responde: “Si hay personas implicadas en el golpe, que me conocían antes, y que fueron engañadas para participar, creo que están cometiendo una traición en contra del gobierno y contra mis principios”.

Durante la entrevista, realizada en una sala de uno de los edificios del Centro de Oración y Retiro Generación Dorada, el antiguo complejo de vacaciones donde reside, Gülen insiste en que él es demócrata y europeísta. Reitera su compromiso con el entendimiento entre las religiones y repite sus proclamas en contra del golpismo.

Para explicar su pasada alianza con Erdogan, sostiene que él siempre ha apoyado a los líderes que prometieron “mejorar la democracia, los derechos humanos y las libertades de Turquía”. “Yo creía y sigo creyendo que la pertenencia de Turquía en la Unión Europea consolidará la democracia turca y evitará futuros golpes militares o el gobierno de un solo hombre que busca Erdogan”, dice.

A la pregunta sobre si Erdogan debería dimitir, mide sus palabras: “Me parece que la vía actual de Erdogan daña a Turquía y a la región. Pero corresponde al pueblo turco mantenerlo o forzar su marcha con sus votos”, dice. Al mismo tiempo, evoca la Alemania de los años treinta y cuarenta. "Esto puede darles una idea de la situación en la que está Turquía hoy", dice.

Al contrario que otros líderes musulmanes, Gülen no critica la injerencia occidental en los asuntos de los países donde esta confesión es mayoritaria. “Necesitamos el apoyo de todo el mundo democrático en el exterior, para ayuda a los musulmanes a apartarse de estos problemas”, dice.

Se ha comparado al gülenismo con la organización católica Opus Dei: centrada en la educación, influyente en la política y las altas esferas profesionales, y creadora de lealtades difícilmente quebrantables. Una de las acusaciones más insistentes sobre los gülenistas es su capacidad de infiltrarse en las estructuras de poder turcas. Hasta el punto de crear un Estado paralelo.

Gülen se distancia de las purgas ejecutadas en la década pasada por funcionarios gülenistas, cuando Erdogan era su aliado, y rechaza la palabra infiltración, pero defiende el derecho de los seguidores de su movimiento de trabajar para el Estado.

“Si eres un ciudadano turco legal es normal trabajar, postularte, y que te nombren en estas posiciones. Esto no es infiltración”, dice. “Puede que yo pida a las personas que se eduquen para servir a tu país, ir a estas instituciones para servir a tu pueblo”, continúa, “pero si me pides que nombre a veinte personas que trabajan para el gobierno, no las conozco por su nombre”.

En el pulso desigual entre Erdogan y Gülen, Estados Unidos —socio Turquía en la OTAN y en la lucha contra el Estado Islámico en Siria— tiene un papel clave. En sus manos está su futuro, la decisión de extraditarlo.

Gülen desea que la Unión Europea, EE UU y la OTAN presionen a Erdogan para que regrese a la democracia. Si es preciso, con sanciones. Y reitera su llamamiento a que una investigación internacional investigue el episodio.

“Si tal investigación concluye sólo una décima parte de los que Erdogan sostiene, me compro mi billete y voy a Turquía”, dice. Por ahora, avisa, no ve ninguna posibilidad de un juicio justo en su país “mientras la tiranía del señor Erdogan continúe”.

“Siempre vivo con añoranza”, explica el clérigo, que en estos años en EE UU no ha aprendido inglés. “Si muero aquí, por favor llevad mi cadáver a mi patria y enterradme junto a mi madre”.

Azerbaiyán camino a legitimar su sangrienta dictadura...


Azerbaiyán encara a un referéndum crucial para su futuro. El próximo lunes, el electorado votará una reforma constitucional pensada y diseñada para extender más aún los poderes del presidente Aliyev. El Consejo de Europa teme que el equilibrio institucional quede deshecho si triunfa el “sí”, pero el gobierno y sus aliados parlamentarios sostienen que la reforma es necesaria para garantizar la estabilidad nacional.


“La estabilidad del Estado y una gobernanza efectiva son estratégicamente muy importantes”, explica el jefe del Comité parlamentario de Asuntos Exteriores y relaciones Interparlamentarias, Samad Seyidov. “Y desde este punto de vista, este referéndum y las enmiendas que se adopten asegurarán la estabilidad, el dinamismo y un desarrollo consistente del país”.


De cinco años, el mandato presidencial de Ilham Aliyev pasará a ser de siete si la reforma sale adelante. Y nadie duda de que así será, después de que en 2009 Aliyev consiguiera, también por referéndum, eliminar el límite de dos mandatos presidenciales para perpetuarse en el poder.

“El presidente goza de prácticamente todos los poderes”, subraya Emin Aslanov, del Centro de Iniciativas Civiles del Cáucaso. “Se puede decir que tiene superpoderes en Azerbaiyán. Ahora tiene aún algunos límites legislativos. Pero eso cambiará el lunes porque se asegurarará el poder total”.

Azerbaiyán y su petróleo llevan más de tres décadas bajo el mando de la familia Aliyev. Naciones Unidas ha denunciado en más de una ocasión los desmanes del gobierno con la prensa y la dura represión que sufren los opositores, pero el gobierno tira la pelota para fuera y se remite a los resultados de las urnas.


"Karabajn tiene un único destino:la Independencia" por Edward Nalbandian


El ministro de Exteriores armenio,ha reivindicado el principio de autodeterminación de los pueblos en su discurso en la Asamblea General de Naciones Unidas y ha acusado a Azerbaiyán de practicar una política de limpieza étnica en la región de Nagorno-Karabaj que le priva de autoridad en la conflictiva zona, cuya soberanía está en disputa y que vivió el pasado mes de abril un recrudecimiento de la violencia.

"Azerbaiyán tercamente se niega a reconocer el derecho del pueblo de Nagorno-Karabaj a la libre determinación. Como parte de la política de limpieza étnica y agresión, que comenzó a finales de los 80, los armenios fueron masacrados y expulsados de sus casas. El ganador del premio Nobel de la paz Andréi Sajarov lo denominó como un nuevo genocidio del pueblo armenio", ha señalado Nalbandian en su intervención.

Para el mandatario la respuesta militar frente a la aspiración pacífica de ejercer el derecho a la autodeterminación "solo legitima las aspiraciones y priva al agresor de cualquier autoridad sobre ese pueblo".

Sobre los enfrentamientos del pasado mes de abril, cuando se rompió el alto el fuego que perduraba desde 1994, el ministro armenio ha detallado los episodios de dura violencia que sufrieron tres militares armenios que tras ser capturados fueron decapitados "al estilo de Estado Islámico".


"Los líderes de Azerbaiyán condecoraron públicamente a los que perpetraron estos crímenes. Durante el intercambio de militares muertos entre Nagorno-Karabaj y Azerbaiyán, que fue medidado por el Comité Internacional de la Cruz Roja, se registró que los cadáveres transferidos del lado de Bakú tenían signos inequívocos de tortura y mutilación", ha criticado el ministro armenio.


Por último, ha instado a que se respeten los acuerdos alcanzados en las cumbres de Viena y San Petesburgo, en los meses de mayo y junio, respectivamente, que piden la adherencia total al acuerdo de alto el fuego de 1994, la creación de mecanismos de investigación de violaciones a la tregua y el aumento de las capacidades del personal de la OSCE en la zona.

El conflicto de Nagorno-Karabaj que divide a Armenia y Azerbaiyán experimentó del 2 al 5 de abril una escalada después de haber permanecido latente durante más de dos décadas. El día 5 se anunció el alto el fuego, sin embargo, los bandos del conflicto continúan denunciando violaciones de la tregua.

martes, 20 de septiembre de 2016

25 años de la independencia de Armenia.



La República de Armenia actual puede ser llamada como “la última Armenia”. Teniendo en mente los diversos reinos antiguos y medievales, las dinastías y alianzas, así como también la breve república de 1918 e incluso la pertenencia soviética, el número de Armenias en la historia puede variar entre cinco y diez. La que existe hoy en día, con Ereván como su capital, declaró formalmente su independencia el 21 de Septiembre de 1991, el día en que un referéndum sobre la liberación de la URSS tuvo lugar en todo el país. Esa votación se llevó a cabo en el contexto de soltar las restricciones desde Moscú que se venían sucediendo desde años precedentes, y que llevaron ulteriormente al colapso de la Unión Soviética el 25 de diciembre de 1991. Luego de eso, la República de Armenia fue aceptada como miembro efectivo de la comunidad internacional como un estado soberano, uniéndose a las Naciones Unidas en 1992.

Fue un sueño hecho realidad para los armenios de todo el mundo el tener nuevamente a Armenia en los mapas.

La Constitución de la República de Armenia –adoptada el 5 de Julio de 1995 y enmendada en el 2005- le otorga al país el diseño de una república democrática. El presidente es la figura pública de mayor prominencia, ciertamente el más poderoso, a pesar de que la Asamblea Nacional (el parlamento, equivalente al Congreso de los Estados Unidos) también tiene su grado de participación, como el Gobierno (eso es, el primer ministro y el gabinete), en el tratado de las leyes del país. Armenia también tiene una Corte Constitucional –el cuerpo judicial supremo del país, que supervisa la legislación en general y decide sobre casos que tratan sobre la Constitución en sí. La constitución de Francia y también la de Estados Unidos, hasta cierto punto, ha servido de modelo para esta nueva Armenia. Los planes para una reforma constitucional han estado en progreso desde 2013, con la posibilidad futura de introducir un estilo más británico del sistema parlamentario.

La Constitución de la República de Armenia –adoptada el 5 de Julio de 1995 y enmendada en el 2005- le otorga al país el diseño de una república democrática. El presidente es la figura pública de mayor prominencia, ciertamente el más poderoso, a pesar de que la Asamblea Nacional (el parlamento, equivalente al Congreso de los Estados Unidos) también tiene su grado de participación, como el Gobierno (eso es, el primer ministro y el gabinete), en el tratado de las leyes del país. Armenia también tiene una Corte Constitucional –el cuerpo judicial supremo del país, que supervisa la legislación en general y decide sobre casos que tratan sobre la Constitución en sí. La constitución de Francia y también la de Estados Unidos, hasta cierto punto, ha servido de modelo para esta nueva Armenia. Los planes para una reforma constitucional han estado en progreso desde 2013, con la posibilidad futura de introducir un estilo más británico del sistema parlamentario.

Armenia es el territorio nacional del pueblo armenio disperso –el punto de reunión de todos los grupos, facciones y representantes diversos de los armenios alrededor del mundo. Los proyectos de la Diáspora en la República van desde inversiones financieras a trabajo voluntario, asistencia e infraestructura en el sector público, por no mencionar las actividades artísticas y culturales y los lazos religiosos. Muchos armenios de la Diáspora han hecho permanentes movimientos a Ereván y a otros lugares del país a lo largo de los años, mientras otros tienen segundos hogares donde pasan sus vacaciones de verano.

domingo, 11 de septiembre de 2016

Azeries protestan en contra de la reelección presidencial indefinida !



Miles de azerbaiyanos se manifestaron hoy en Bakú en contra de un referéndum constitucional que podría aumentar el mandato presidencial de cinco a siete años.

El presidente azerbaiyano, Ilham Alíev, en el poder desde 2003, remitió hace dos meses la propuesta de plebiscito al Tribunal Constitucional, que convocó la consulta para el 26 de septiembre.

Alíev también propuso crear la figura del vicepresidente, introducir la opción de disolver el Parlamento y rebajar de 25 a 18 años la edad mínima para convertirse en diputado.

Al término del mitin de protesta, que contaba con autorización oficial, los organizadores aprobaron un llamamiento para suspender el referéndum y abrir un proceso de reformas democráticas en el país.

Azerbaiyán, un país bañado por el mar Caspio que acoge ingentes recursos energéticos, es criticado por su persecución de la oposición, la prensa independiente y de los activistas de derechos humanos, algunos de cuyos miembros están en la cárcel.

Alíev ya indignó a la oposición y a la comunidad internacional al convocar en 2009 un referéndum que le permite presentarse indefinidamente a la reelección.

Los países occidentales se abstienen de criticar duramente a Azerbaiyán, ya que se trata de un país crucial en sus planes de diversificar sus fuentes de energía a la hora de tender gasoductos desde Asia Central eludiendo territorio ruso.


Los armenios sirios retornan a la Madre Patria


Para Hovig Ashjian y su familia, la vida en Alepo, Siria, era feliz antes de la guerra. Él trabajaba como joyero en un taller de su propiedad, mientras que su mujer, Tamara, era chef. Su hija Rita, de 16 años, iba al colegio. Pero cuando el conflicto comenzó y destrozó su país, su familia (que era parte de una comunidad formada por 80.000 sirios armenios) se vio obligada a huir.

“Perdí todo lo que tenía, mi casa, mi trabajo, mi coche” recuerda Hovig. “Todo lo que me importaba desapareció en un instante. Estábamos asustados. Pensamos que el único sitio al que podíamos ir era Armenia, la tierra de nuestros ancestros”.

En otoño de 2012, Hovig y su familia se marcharon a Armenia. Necesitaron tres horas para poder hacer el trayecto de 20 minutos de su casa al aeropuerto. “Teníamos miedo de mirar atrás”, dice Hovig. “Escapamos por poco de un bombardeo”.

Encontraron seguridad y una nueva vida en Armenia, pero tuvieron que abandonar todas sus pertenencias.

“Mi hija tiene la esperanza de que su biblia y sus DVD estén bien guardados en algún rincón seguro de su habitación” comenta Hovig, triste. “No puede aceptar el hecho de que nuestra casa esté completamente destruida y de que no quede nada”.

ACNUR ha ayudado a Hovig y a su familia a comenzar una nueva vida con la ayuda de otras ONG socias, como Misión Armenia, la Cruz Roja Armenia y la fundación humanitaria suiza KASA. Gracias a un plan de subsidios de alquiler, han podido permitirse un pequeño apartamento en Ereván, la capital de Armenia.

Hovig ha recibido formación profesional y se ha beneficiado de los proyectos para la generación de ingresos. También ha usado sus conocimientos para crear un nuevo negocio de joyas en Armenia.

“Recuerdo que podía emplear todo el día y la noche para crear una joya. Estaba nervioso, pensando si llegaría a vender alguna. Pero, poco a poco, al conocer a la gente, escucharlos, conocer sus preferencias, al abaratar los precios y haciendo pedidos especiales, conseguí que se interesaran por mi trabajo. Muchos de ellos son ahora clientes permanentes”.

La esposa de Hovig también ha encontrado un nuevo trabajo y su hija acaba de ser aceptada en la universidad. Una de sus joyas tradicionales llegó incluso a ganar un premio en una exhibición.

Después de escapar de la guerra, parece que por fin la vida se ha reencauzado. “Hoy puedo decir con orgullo que, aunque pequeños, tengo unos ingresos estables” afirma Hovig con una sonrisa. “Doy gracias a Dios por concederme el talento para ser joyero. Me da unos ingresos dignos y me permite criar a mi hija en Armenia”.

Como sirio armenio, Hovig sabe lo importante que es el trabajo de ACNUR. Es descendiente de la comunidad de armenios exiliados en Alepo que se beneficiaron del trabajo de Fridjof Nansen, que ayudó a repatriar a miles de refugiados en Armenia, el Líbano y Siria después de 1915. La comunidad armenia es conocida por sus artesanos, joyeros y empresarios que contribuyeron ampliamente al desarrollo y al enriquecimiento de Siria.

A pesar de que Hovig y otras personas han tenido cierto éxito, no es fácil para los desplazados sirios superar las dificultades a la hora de integrarse. Necesidad de asistencia médica, problemas de alojamiento, falta de trabajos bien pagados, un duro ambiente de negocios, barreras lingüísticas y culturales son grandes impedimentos a los que la mayoría de familias sirias deben enfrentarse.

“Los sirios armenios le deben mucho al gran amigo de todos los armenios, Fridjof Nansen” explica Hovig. “Nuestros abuelos sobrevivieron gracias al pasaporte Nansen que abrió las puertas a una nueva vida en un nuevo país, Siria. Por eso, debemos recordar su nombre y comenzar dignamente una nueva vida, esta vez en el país de nuestros ancestros, Armenia”.

“Los sirios armenios le deben mucho al gran amigo de todos los armenios, Fridjof Nansen” explica Hovig. “Nuestros abuelos sobrevivieron gracias al pasaporte Nansen que abrió las puertas a una nueva vida en un nuevo país, Siria. Por eso, debemos recordar su nombre y comenzar dignamente una nueva vida, esta vez en el país de nuestros ancestros, Armenia”.

“Los sirios armenios, que se sentían totalmente integrados en Siria, tuvieron que huir otra vez, esta vez a Armenia, el país de nuestros ancestros. Pero también contribuimos al desarrollo de la sociedad y de la economía en Armenia, ya que nosotros, los sirios armenios, hemos traído con nosotros una gran cantidad de valores y habilidades” añade.

Desde el comienzo del conflicto en siria, 17.000 ciudadanos sirios, principalmente con orígenes armenios, han llegado a Armenia. De estos, aproximadamente 13.000 mantienen el estatus de refugiados a fecha de julio de 2015.

Para asistirlos, el gobierno ofrece la nacionalización simplificada, acelera los procedimientos de asilo y ofrece permisos de residencia a corto, medio y largo plazo.

Además, ACNUR, junto a ONG compañeras, está trabajando para ajustar las urgentes necesidades humanitarias de las familias sirias desplazadas, ofreciendo un amplio servicio de asistencia médica y proyectos de integración.

Por Anahit Hayrapetyan

http://www.acnur.org/noticias/noticia/el-legado-de-nansen-pervive-para-los-refugiados-sirios-en-armenia/

ARMENIOS SIRIOS: HÉROES ANÓNIMOS QUE SALVARON VIDAS


Durante el Genocidio Armenio, la ciudad de Alepo se convirtió en el principal centro de convergencia de las rutas de deportación. Las caravanas que sobrevivieron la intrincada travesía, comenzaron a llegar a esta zona en mayo de 1915. En un informe del 5 de junio, el cónsul norteamericano en Alepo, Jesse Jackson, expresó: “Hay oleadas continuas de armenios que desembocan en Alepo, procedentes de los pueblos y las aldeas aledañas…El gobierno no les facilita animales, por lo tanto aquellos que no tienen la suerte de disponer de un medio de transporte, se ven obligados a hacer el trayecto a pie”.



Muchos no tenían lugar donde refugiarse. Un deportado de Sivas, llamado John Minassian reveló en las memorias escribiera décadas más tarde, que encontró refugio, por un corto tiempo, en el patio de la casa del Reverendo Hovhannes Eskijian en Alepo, donde “había unas 20 familias hacinadas… estaban todos en ruinas y de a poco se iban muriendo de hambre o por falta de atención. Casi sin vida, tenían poca protección en este lugar, pero encontraron en el Reverendo a un amigo”. Según un testigo, Hayg Toroyan, “Los armenios de Alepo aceptaban a los deportados con los brazos abiertos. Les abrían las puertas de sus casas… Sin embrago, las calles, los campos y las esquinas olvidadas de la ciudad estaban repletas de miles de personas desahuciadas cuyos hogares habían sido destruidos”.



En la ciudad de Alepo, la comunidad armenia de 10.000 personas se movilizó para brindarles asistencia a los deportados. Al principio, la Iglesia Apostólica Armenia de la ciudad improvisó medidas para ayudar a los refugiados a medida que arribaban. El 24 de mayo, la iglesia comenzó una labor mucho más coordinada. Invitó a un grupo de líderes de la comunidad a que formaran un Consejo para los Deportados (en lo sucesivo, el Consejo) encargado de “ocuparse de las necesidades económicas, morales y médicas inmediatas” de los armenios recién llegados.



Las iglesias católica y evangélica armenias de la ciudad lanzaron sus propias iniciativas de ayuda y esfuerzos coordinados atendiendo las necesidades que surgían. El cónsul norteamericano, Jesse Jackson, fue testigo de esta corriente de apoyo por parte de la comunidad desde el principio y les informó a sus superiores que el 5 de junio los deportados “están recibiendo atención dentro de la ciudad por la población armenia que empatiza con ellos”. En otro informe, detalló que: “Cada comunidad religiosa cuenta con una comisión de ayuda para cuidar a los suyos”.



El Consejo, inmediatamente confeccionó listas de los deportados en Alepo y en los pueblos y aldeas vecinas para determinar las necesidades inherentes a la vivienda, el alimento y la salud. Desde el comienzo, el Consejo se ocupó de que los esfuerzos no se limitaran ni a la ciudad, ni a la provincia de Alepo, por el contrario, se enviaban ayuda y misiones incluso hasta Deir Zor. Como la Iglesia Apostólica Armenia no tenía presencia allí, la Prelatura Católica Armenia de Deir Zor actuó como socio local y la comunicación entre las dos partes se llevó a cabo por medio de telegramas que la Prelatura Católica Armenia en Alepo le enviaba a su par en Deir Zor. El Catolicós de Cilicia, Sahag II Khabayan, que el 28 de mayo había llegado a Alepo, proveniente de Adana, tuvo un papel fundamental en los esfuerzos de ayuda.



La comunidad Armenia de Alepo intentó, incluso, cambiar la política de deportación del gobierno en mayo y junio de 1915. En primer lugar, presentó una apelación ante el Ministro Otomano de la Armada y Comandante del Cuarto Ejército, Kemal Pashá, a fin de evitar que los deportados armenios que encontraron refugio en la ciudad sean deportados nuevamente al desierto. Al no recibir respuesta alguna, las autoridades de la comunidad apelaron esta vez ante el Primer Ministro, el Ministerio de Guerra y el Ministerio del Interior, suplicándoles que les pusieran fin a tales órdenes. Tras no recibir respuestas tampoco de la capital, el Consejo envió una apelación más, dirigida al propio Sultán y firmada por las mujeres deportadas. Sin embargo, las deportaciones continuaron.



El Catolicós enseguida se dio cuenta de que poco se conseguiría con las apelaciones ante las autoridades turcas otomanas. En una carta del 19 de julio dirigida al Patriarca Armenio de Estambul, Zaven Der Yeghiayan, el Catolicós escribió: “El pueblo [armenio] ha enloquecido; no logra comprender la dimensión y la naturaleza del dolor… Me presionan para que apele ante el Sultán y la elite. Me presionan para que envíe telegramas pidiendo pan para los hambrientos, pero se que cada apelación, cada acto de súplica es inútil y lo único que hace es abrir la puerta a medidas más estrictas y a más maldad”.



El gobierno de inmediato tomó medidas contra los esfuerzos de ayuda de la comunidad armenia en Alepo, encarcelando a varios líderes, enviando a otros al exilio, incluso a miembros del clero y hasta al Catolicós, quien fue enviado a Jerusalén. Durante los meses que siguieron, decenas de miles de deportados morirían en campos de concentración de la Siria Otomana, principalmente a lo largo del río Éufrates y en Ras al-Ain. En el verano de 1916, alrededor de 200.000 sobrevivientes serían masacrados en Deir Zor.



Aún así, las redes humanitarias desplegadas en Alepo lograron anclar a miles de deportados armenios a la ciudad. Se utilizaron diversas estrategias, en especial, emplear a deportados sin goce de sueldo en fábricas y hospitales que servían a las fuerzas armadas y obtener permisos de autoridades locales para abrir y ampliar orfanatos que albergaban a miles de niños armenios. Esta red, cuyo núcleo estaba formado por líderes cívicos y religiosos de la comunidad armenia, fue reforzada por misioneros y otros ciudadanos extranjeros que vivían en la región y, en ocasiones, fue respaldada por diplomáticos occidentales.



Hasta el fin de la Primera Guerra Mundial y aún en los años posteriores, la red de ayuda continuó apoyando a los miles de deportados que lograron de una forma u otra, desaparecer en el tejido de la metrópolis o buscar refugio en orfanatos y centros comunitarios, escapando así el trágico destino de volver a ser deportados al desierto. Gracias, en gran parte, a los esfuerzos de la comunidad armenia de Alepo, miles de armenios lograron sobrevivir al genocidio y reconstruir sus vidas en la diáspora.


Khatchig Mouradian es el Coordinador del Programa de Genocidio Armenio en el Centro de Estudios de Genocidios y Derechos Humanos en la Universidad de Rutgers, donde también es profesor en historia y sociología.


https://auroraprize.com/es/armenia/detail/7693/armenios-sirios%253A-h%25C3%2589roes-an%25C3%2593nimos-que-salvaron-vidas

viernes, 9 de septiembre de 2016

Turquía reclutará a 20.000 policías y suspendió a 11 mil docentes...


El Gobierno de Turquía reclutará a 20.000 policías más en los próximos meses y desplegará a la mitad de ellos en unidades de fuerzas especiales.
Turquía reclutará a 20.000 policías en los próximos meses

Las autoridades turcas ya habían anunciado que reforzarían el cuerpo policial tras el fallido golpe de Estado del 15 de julio, en el que un grupo de militares sublevados utilizaron carros de combate y cazas para intentar derrocar al Gobierno. El titular de Interior ha anunciado, además, que se va a nombrar a administradores para 28 municipalidades. Responsables de los servicios de seguridad y la agencia de noticias Anatolia han informado de que el Gobierno está nombrando administradores para sustituir a los alcaldes que pertenecen al partido opositor prokurdo HDP por su supuesto apoyo a los milicianos del Partido de los Trabajadores del Kurdistán.

Al mismo tiempo suspendió a 11 mil docentes sospechados de estar vinculados al Partido de los Trabajadores de Kurdistan (PKK), considerado por Ankara un grupo terrorista.El número, sin embargo, podría aumentar, ya que según el Primer Ministro turco, Binali Yildirim, al menos 14 mil docentes estuvieron asociados con actividades terroristas. En Turquía hay actualmente 850 mil docentes, lo cual significa que la suspensión afecta a casi el 2 por ciento del personal, cuando falta una semana al comienzo de las clases.La agencia de noticias oficial Anadolu afirmó que estaban sospechados de actividades "en soporte de la organización separatista terrorista y sus afiliados".

La suspensión de los docentes es el último capitulo en el largo conflicto entre el gobierno turco y los independentistas kurdos, en el que murieron miles de personas.

domingo, 4 de septiembre de 2016

El asesinato de los Comisarios de Bakú.




Los 26 Comisarios de Bakú fueron miembros dirigentes bolcheviques y social-revolucionarios de izquierda de la Comuna de Bakú, régimen soviético establecido en Azerbaiyán en 1918. La comuna fue establecida en la ciudad de Bakú (capital de la pre-soviética y brevemente independiente República Democrática de Azerbaiyán, actualmente República de Azerbaiyán).

La comuna, liderada por Stepán Shaumián, existió hasta el 26 de julio de 1918, cuando los bolcheviques fueron forzados a abandonar el poder por una coalición de dashnaks, social-revolucionarios de derecha y mencheviques.

Tras su derrocamiento, los comisarios intentaron abandonar Bakú, pero fueron capturados por la Dictadura del Caspio Central y encarcelados. Según la historiografía soviética, el 14 de septiembre de 1918, durante la caída de Bakú ante las fuerzas otomanas, soldados del Ejército Rojo irrumpieron en su prisión y liberaron a los comisarios; entonces embarcaron en un barco hacia Krasnovodsk, donde fueron inmediatamente detenidos por las autoridades locales y, en la noche del 20 de septiembre de 1918, ejecutados por un pelotón de fusilamiento entre las estaciones de Pereval y Ajcha-Kuima del Ferrocarril Trans-Caspio.

La Comuna de Bakú

La Comuna de Bakú, una entidad política de corta vida, duró del 13 de abril al 25 de julio de 1918. Llegó al poder tras una confrontación sangrienta con la población musulmana, conocida como Jornadas de Marzo en Bakú. Durante su breve existencia la Comuna tuvo que enfrentarse a varios problemas: desde el desabastecimiento de alimentos y suministros hasta la amenaza del poderoso Ejército otomano que quería atacar Bakú. A pesar de las difíciles condiciones, la Comuna llevó a cabo diversas reformas sociales, como la nacionalización de la industria del petróleo. El proceso de nacionalización fue sencillo, poniendo bajo control militar las instalaciones y aplicando la dictadura del proletariado teorizada por Lenin.

Así es como Víctor Serge describió la situación de mayo, junio y julio, y el estado del pequeño Ejército Rojo de Bakú:«En mayo, junio y julio los habitantes solo podían recibir diminutas raciones de nueces y semillas de girasol; las pequeñas cantidades de maíz que el sóviet consiguió traer por mar estaban reservadas para las tropas. Los intentos de requisas fueron realizados por el pequeño Ejército Rojo de Bakú, un cuerpo pobremente disciplinado y gestionado, compuesto mayoritariamente por soldados que eran ajenos al espíritu revolucionario del proletariado. Bebían en exceso y saqueaban a los campesinos musulmanes, causando desafección entre ellos.»

El 5 de junio de 1918, el Ejército Rojo de Bakú repelió un asalto realizado por tropas otomanas abrumadoramente superiores en número, pero más tarde lanzó un asalto infructuoso contra Ganja, localidad donde se encontraba el cuartel general del Ejército Islámico del Cáucaso (unidad otomana) y fue obligado a retirarse a Bakú. En este punto, los dashnaks, eseristas de derecha y mencheviques comenzaron a negociar con el general Lionel Dunsterville, comandante de las tropas británicas en Persia, invitando a sus tropas a Bakú para defender la ciudad de un inminente ataque otomano. Los bolcheviques y sus aliados izquierdistas se opusieron a este plan, pero el 25 de julio la mayoría del sóviet votó el llamamiento a los británicos, y los bolcheviques dimitieron.

Los dirigentes de la Comuna de Bakú fueron encarcelados acusados de participar en formaciones militares ilegales y saqueo militarizado, particularmente durante las atrocidades cometidas en las Jornadas de Marzo, y fueron reemplazados por la Dictadura del Caspio Central.

Al contrario de lo que sucedió en muchas zonas de Rusia, donde los bolcheviques consiguieron una mala reputación por ejecutar cruelmente a aquellos que no les apoyaban, los bolcheviques de Bakú no fueron tan estrictos. La Cheka de Bakú ejecutó solo a dos personas, ambas miembros del sóviet sorprendidos malversando fondos públicos: el comisario de Finanzas, Aleksandr Kireev, y el comisario del vapor Meve, Serguéi Prokovski.

Las ejecuciones

Tras la caída del sóviet de Bakú en julio de 1918, los líderes bolcheviques y algunas tropas leales trataron de alcanzar Astracán, el único puerto del mar Caspio aún en manos bolcheviques. Sin embargo, su barco fue interceptado por buques militares de la Flota del Caspio y tras someterles a un bombardeo de una hora en mitad del mar, se rindieron y regresaron a Bakú. La mayoría de los militantes bolcheviques fueron detenidos y permanecieron en prisión hasta que, tras la caída de Bakú en manos otomanas, una unidad de comando del Ejército Rojo, liderada por Anastás Mikoyán, les liberó de la cárcel.

Shaumián, Prokofi Dzhaparidze, Meshadi Azizbekov, y sus camaradas, junto a Mikoyán, se embarcaron entonces en el buque Turkmen, intentando alcanzar Astracán por mar. Según recientes historiadores, los marinos optaron no obstante por navegar a Krasnovodsk, por temor a ser detenidos en Astracán. En Krasnovodsk los comisarios fueron arrestados por el comandante local, quien pidió nuevas órdenes al Comité de Ashjabad, liderado por el social-revolucionario Fiódor Funtikov, sobre que debía hacerse con ellos. Tres días después, el general Wilfrid Malleson, tras conocer su arresto, contactó con el oficial de enlace británico en Asjabad, capitán Reginald Teague-Jones, para sugerirle que los comisarios fuesen entregados a las fuerzas británicas para ser usados como rehenes a cambio de ciudadanos británicos en poder de los soviéticos.
El mismo día, Teague-Jones asistió a la reunión del Comité de Asjabad, que tenía el cometido de decidir sobre el destino de los comisarios. Por alguna razón, Teague-Jones no comunicó la solicitud de Malleson al comité, y se excusó diciendo que había abandonado la reunión antes de que se tomase la decisión. Además, afirmó que fue al día siguiente cuando descubrió que el comité había decidido al final enviar la orden de que los comisarios fuesen ejecutados. Según el historiador Richard H. Ullman, Teague-Jones podría haber detenido las ejecuciones si hubiese querido, ya que el Comité de Asjabad dependía del apoyo británico y no podía rechazar una solicitud de su poderoso aliado, pero decidió no hacerlo.

En la noche del 20 de septiembre, tres días después de ser detenidos, veintiséis de los comisarios fueron ejecutados por un pelotón de fusilamiento entre las estaciones de Pereval y Ajcha-Kuima del Ferrocarril Trans-Caspio.

En 1922, V. Chaikin, un periodista social-revolucionario, publicó una descripción de los momentos previos a la ejecución:«Alrededor de las 6 de la madrugada (relató un testigo), los veintiséis comisarios escucharon el destino que les aguardaba mientras estaban en el tren. Fueron sacados fuera en grupos de ocho o nueve hombres. Estaban obviamente conmocionados, y se mantuvieron en un tenso silencio. Un marino gritó: 'Yo no estoy asustado. Estoy cayendo por la libertad.' Uno de los verdugos le replicó que 'Nosotros también moriremos por la libertad tarde o temprano, pero para nosotros significa algo diferente que para vosotros.' El primer grupo de comisarios, llevados desde el tren hasta la semioscuridad, fue despachado con una sola salva. El segundo grupo trató de salir corriendo pero fue segado tras varias descargas. El tercero se resignó a su destino…»

Impacto

Oficiales soviéticos culparon más tarde de las ejecuciones a agentes británicos que actuaban en la zona de Bakú en aquél momento. Cuando se estableció el dominio soviético en toda la zona del Caspio, Funtikov, jefe del Comité de Asjabad responsable de las ejecuciones, fue encarcelado. Funtikov culpó de las ejecuciones al Reino Unido, y en particular a Teague-Jones, quien, afirmó, le había ordenado que disparase a los comisarios. Funtikov fue juzgado y ejecutado en Bakú en 1926. El Reino Unido negó su implicación en el incidente, afirmando que fue realizado por oficiales locales sin conocimiento de las tropas británicas.

Esta acusación causó una mayor tirantez en las elecciones entre el Reino Unido y el nuevo Gobierno soviético, y ayudó a llevar a la actitud de confrontación dada en ambos lados en los años siguientes.

Según la historiografía, dos oficiales británicos a bordo del barco de los comisarios dieron la orden de navegar hacia Krasnovodsk en lugar de a Astracán, donde encontraron a un Gobierno liderado por eseristas y oficiales británicos que inmediatamente ordenador el arresto de los comisarios. Los soviéticos inmortalizarían más adelante la muerte de los 26 Comisarios a través, entre otras, de películas obras de arte, sellos, y obras públicas como el Memorial a los 26 Comisarios en Bakú. En el famoso cuadro de Isaak Brodski, los oficiales británicos son retratados presenciando las ejecuciones.

Los comisarios

Los veintiséis Comisarios de Bakú no eran todos comisarios ni bolcheviques; algunos de ellos eran social-revolucionarios de izquierda y dashnaks. Había muchas nacionalidades entre ellos: griegos, letones, judíos, rusos, georgianos, armenios y azeríes.

Los 26 comisarios eran:16

Stepán Shaumián: presidente del Consejo de Comisarios del Pueblo de Bakú, comisario extraordinario para el Cáucaso.
Prokofi Dzhaparidze: presidente del Comité Ejecutivo del Sóviet de Bakú.
Meshadi Azizbekov: vicecomisario del Pueblo de Asuntos Internos, comisario de la gubernia de Bakú.
Iván Fioletov: presidente del Consejo de Economía Nacional.
Mir-Hasán Vazirov: comisario del Pueblo de Agricultura.
Grigori Korganov: comisario del Pueblo de Guerra y Asuntos Navales.
Yákov Zevin: comisario del Pueblo de Trabajo.
Grigori Petrov: comisario militar del Consejo de Comisarios del Pueblo de la RSFS de Rusia en la región de Bakú.
Iván Maliguin: vicepresidente del Comité Militar Revolucionario del Ejército del Cáucaso.
Arsen Amir: editor jefe del periódico El Obrero de Bakú.
Surén Osepian: editor jefe del periódico Izvestia del Sóviet de Bakú.
Vladímir Polujin: comisario colegiado de Guerra y Asuntos Navales de la RSFS de Rusia.
Fiódor Solntsev: miembro del Ejército Rojo.
Armenak Boriyan: periodista.
Iván Gabishev: comisario político de brigada.
Mark Koganov: miembro del Comité Militar Revolucionario.
Bagdasar Avakian: comandante militar de Bakú.
Irakli Metaksa: guardaespaldas de Shaumián.
Iván Nikoláishvili: guardaespaldas de Dzhaparidze.
Aram Kostandian: vicecomisario del Pueblo de Agricultura.
Solomón Bogdánov: miembro del Comité Militar Revolucionario.
Anatoli Bogdánov: empleado.
Isai Mishne: secretario del Comité Militar Revolucionario.
Tatevos Amírov: comandante de caballería, miembro del Dashnak.

Demolición del Memorial a los 26 Comisarios y traslado de sus restos




El Memorial a los 26 Comisarios de Bakú era un símbolo de la RSS de Azerbaiyán.
En enero de 2009, las autoridades de Bakú comenzaron la demolición del Memorial a los 26 Comisarios de la ciudad.18 Éste era el último monumento que quedaba de los varios que se levantaron en conmemoración de los comisarios en aquél parque durante el periodo soviético. A este último monumento se le había quitado ya la valla protectora en julio de 2008. Los restos de los comisarios fueron trasladados al cementerio de Hövsan el 26 de enero de 2009, con la participación del clero musulmán, judío y cristiano, que dirigieron las ceremonias religiosas.

Se opusieron al desmantelamiento algunos políticos izquierdistas locales y en particular el Partido Comunista de Azerbaiyán.También enfadó a Armenia, ya que la opinión pública armenia pensó que la demolición y el traslado de los restos estaba motivada por la renuencia de los azeríes (debido al conflicto de Nagorno Karabaj) a tener a armenios enterrados en el centro de su capital. Otro escándalo sucedió cuando notas de prensa azeríes afirmaron que durante la exhumación solo se descubrieron veintiún cuerpos y que «Shaumián y otros comisarios armenios lograron escapar de sus asesinos.».20 21 22 23 Estas informaciones fueron cuestionadas por la nieta de Shaumián, Tatiana, que vive actualmente en Moscú, y que afirmó al diario ruso Kommersant que:

«Es imposible creer que no estuviesen todos enterrados. Hay una película en los archivos de los veintiséis cuerpos siendo enterrados. A parte de esto, mi abuela estuvo presente en la ceremonia.»20

Casi todos los monumentos dedicados a los comisarios en Azerbaiyán que incluían a Shaumián, Azizbekov, Dzhaparidze y Fioletov han sido demolidos. La mayor parte de las calles con su nombre han sido también cambiadas.

Cultura popular

El destacado poeta ruso Serguéi Yesenin escribió Balada a los veintiséis para conmemorar a los Comisarios de Bakú, un poema publicado por primera vez en El Obrero de Bakú del 22 de septiembre de 1925.24

La banda rusa de música alternativa WOMBA nombró a uno de sus álbumes El 27.º comisario.

El destacado escritor italiano Tiziano Terzani escribió sobre los Comisarios de Bakú en su libro Buonanotte, signor Lenin (Buenas noches, Sr. Lenin: un viaje a través del final del Imperio Soviético, 1992).