En respuesta, el presidente armenio, Serge Sargsián, aseguró que estudiará el plan ruso, de cuyos detalles no se ha informado, y que en breve dará una respuesta, informa la Cancillería en su página web.
"Deseamos que el problema se solucione de tal forma que en nuestra región se instaure definitivamente la paz y la estabilidad", afirmó Sargsián durante la reunión con Lavrov.
El presidente ruso, Dmitri Medvédev, asumió el pasado año personalmente la función de mediador en el conflicto para lo que presidió varias reuniones con los líderes armenio y azerbaiyano, que se saldaron sin resultados.
Lavrov viajará en las próximas horas a Bakú para entregar la propuesta rusa a la parte azerbaiyana, cuyo presidente, Ilham Alíev, volvió a amenazar a finales de junio con recurrir a las armas para recuperar el enclave del Karabaj.
Esta semana la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, pidió a Azerbaiyán y a Armenia que redoblen sus esfuerzos de aquí a fines de año para lograr un acuerdo pacífico, que "es una cuestión estratégica para la UE".
A finales de junio ambas países se intercambiaron acusaciones de haber frustrado las negociaciones celebradas en la ciudad rusa de Kazán por los presidentes de ambos países.
Seguidamente, Alíev prometió restablecer "por cualquier medio" la soberanía azerbaiyana sobre el Alto Karabaj y que "la integridad territorial de Azerbaiyán jamás ha sido ni será tema de negociaciones".
Las diferencias entre ambas partes son muy grandes, ya que Azerbaiyán exige la retirada incondicional de las tropas armenias, que serían sustituidas por fuerzas de pacificación, para conceder una amplia autonomía a Nagorno Karabaj.
Armenia defiende el derecho a la autodeterminación del territorio, aunque vincula su estatus definitivo a la celebración de un referéndum.
La disputa armenio-azerbaiyana se remonta a los tiempos de la Unión Soviética, cuando el Karabaj pidió su incorporación a Armenia, tras lo cual estalló una cruenta guerra entre armenios y azerbaiyanos, que se prolongó de 1991 a 1994.
El conflicto armado, la primera guerra entre dos antiguas repúblicas soviéticas, concluyó con el retorno de los azerbaiyanos del Alto Karabaj a Azeirbaijan y la liberacion de una vasta zona de Azerbaiyán, que permitió unir el enclave a Armenia.